ECOS DE DISTANCIA: ES UN ESPACIO EN DONDE EL ECO EN LA DISTANCIA SE VUELVE PALABRA, CONVERTIDA EN POESÍA, ENSAYO, RELATO, CUENTO, LEYENDA, ENTRE OTRAS EXPRESIONES LITERARIAS. ESPERO SINCERAMENTE, QUE HALLE AQUÍ UN ECO QUE VINIENDO DE LA DISTANCIA LE HAGA RECORDAR SUS PROPIAS VIVENCIAS Y LE INSPIRE A ESCRIBIR TAMBIÉN... POR LO PRONTO, AQUÍ, INCLUIRÉ SÓLO POEMAS.
Jorge Arié Cravioto Tellechea

domingo, 28 de enero de 2007

GOTITA DE AGUA




En la punta del dedo una gotita
de agua temblorosa... adopto...
me mira... con sus ojos
de infinito y su bella transparencia...
su inquietante presencia
cosquillea en mi dedo en asombroso
pulsar de átomos
que con los míos... vibran...
con el ritmo sutil de la energía...

Guarda universos en su forma esférica
y como ellos... es la clave
que igual engendra vida...
como signo de mundos... como llave
y código universal
que todo germina... en rítmico azar
de infinitos
confines y en espacios
sin tiempo... sin fin... en eterno estar...

Mi radiante gotita de agua... tiene
la piel delgada y frágil
que invisible sostiene
su cuerpo líquido... fino y ágil...
en su inocente forma
tan tranquila... quieta e inofensiva...
se me antoja
dulce... amorosa... aprensiva...
enigmática y mágica... ¡Novia!...

¡Y pensar que impregnaste con tu vida
la hermosa pequeña Gea!...
¡La linda madre Urantia!...
¡Mi hechizante y tan azulina tierra!...
mi escafandra... mi nave
espacial en la que viajo entre estrellas...
luces bellas
de astros incalculables...
entre negros abismos espectrales...

¡Y pensar que soy en gran parte de ti!
como la inmensidad verde...
como la mar rebelde...
como esa lágrima de amor en mí...
como eco del corazón
que late siempre amante de la bella
luz de amor...
con brillos de pureza...
virgen moza que inventa la razón...

Mi linda... impredecible gota de agua...
que unas veces eres vida
o muerte incomprendida...
¡Torbellino... tsunami... lluvia extraña
en tromba desmedida!...
¡Diluvio convertido en muerte y fragua
de otra vida!...
que viene y va... con agua
mezclando... el químico hálito de vida...

Te prefiero aquí muy quieta en mi dedo
con tu calma inconsistente
y tu alma transparente...
pero también me gustas en el cielo...
en el cantar de arroyos...
en el remanso vivo del paisaje...
¡Dentro en mi oro!...
¡Vibrando en fascinante
latir atómico de mi alma... amante!

Mi radiante gotita de agua... tiene
la piel delgada y frágil...
que invisible sostiene
su cuerpo líquido... fino y ágil...
en su inocente forma
tan tranquila... quieta e inofensiva...
se me antoja
dulce... amorosa... aprensiva...
enigmática y mágica... ¡Novia!.