ECOS DE DISTANCIA: ES UN ESPACIO EN DONDE EL ECO EN LA DISTANCIA SE VUELVE PALABRA, CONVERTIDA EN POESÍA, ENSAYO, RELATO, CUENTO, LEYENDA, ENTRE OTRAS EXPRESIONES LITERARIAS. ESPERO SINCERAMENTE, QUE HALLE AQUÍ UN ECO QUE VINIENDO DE LA DISTANCIA LE HAGA RECORDAR SUS PROPIAS VIVENCIAS Y LE INSPIRE A ESCRIBIR TAMBIÉN... POR LO PRONTO, AQUÍ, INCLUIRÉ SÓLO POEMAS.
Jorge Arié Cravioto Tellechea

domingo, 4 de febrero de 2007

N A D A



Bajo mi árbol favorito
tranquila me envuelve la nada insulsa...
poco a poco la realidad se borra...
otra dimensión coqueta me impulsa
en una inmensidad
serena... vacía en su grácil argucia...

temerosa en su seno
sola mi vacua angustia
divaga sin juicio...
su inmenso espacio desolado asusta...
ahí mi cuerpo ya no existe
invisiblemente pulsa...

se hizo nano partículas
al principio... después... la nada pura...
sólo un cierto halo de memoria existe...
ahora soy caricatura
en una regia vastedad sin nada...
memoria y pensamiento en atadura...

hoy sé que no soy nada
prestada es mi vestidura...
cual un soplo de vida... el pensamiento
y la memoria... me capturan...
sin ataduras soy eterno... sólo
me trasforma el amor y su dulzura...

¡La omnisciencia de los sabios
es mi hechura
por supremo principio!...
¡Energía en ondas de sutil usura
que habitan la totalidad
infinita son mi cuna!...

lo demás es apariencia...
materia... envoltura...
a toda esta infinidad
me lleva la aventura
y en esa dimensión en la que estoy
y no estoy busco el amor que me impulsa...

busco mis amores
perdidos en la nada y su apertura
que me absorbió
junto con ellas en días sin mesura...
las hallo ahí en la memoria
de instantes presos... en la nada augusta...

mis amores idos
pulsan en puntos que el recuerdo acuña
como imágenes nítidas
en la memoria desnuda...
¡Eterno pensamiento vivo
de la realidad que muda!...

poco a poco aquel vacío me libera...
así vuelvo a mi realidad difusa...
estoy conmigo sin ellas...
en la nada mis musas
tan solo son memoria... pensamiento...
que en ella siempre pulsan...

mi árbol me saluda impávido...
la nada eterna cambia su estructura
y en mis manos veo el poema
nacido con su ayuda...
ahora sé que en ella estuve...
¡Todo y nada existe... en su arquitectura!...