Caminando... pensaba yo en mi nada...
ilusiones en hojas sin escritos...
garabatos mentales infinitos...
iban iluminando la calzada...
Rayos de caos entre mi intrincada
mente ideas son sin clisés inscritos...
¡Luciérnagas en sus quinqués gratuitos
encienden con ideas la alborada!...
¡Oh!... tibia noche de mi estrella muda...
las ideas cual céfiros casuales...
externas luces son... mente tozuda...
¿Cuándo abrirán los ojos hoy mortales
para que el amor con un beso acuda
al oro que ven los ojos astrales?.
ECOS DE DISTANCIA
Copyright © 2007. Jorge Arié Cravioto Tellechea
5 comentarios :
Felicidades señor de las letras finas, es hermoso tu soneto
Lo vi en el enlace que tengo al mío
y vine a saludarte
Te seguiré leyendo
Un beso para tí
Hola mi entrañable amigo, una vez mas leerte es muy placentero, este poema en particular es tan nostálgico y al mismo tiempo suplicante, ¿Cuando abriremos los ojos para ser totalmente felices?, quizás mañana despertemos amigo y encontremos el camino. Felicidades por esta composición.
Un beso y estamos pendientes.
Hola amigo, pues fijate que por fin puede darme un espacio y venir a visitarte y he encontrado una agradable sorpresa, te seré sincera, por cuestiones de la rutina ya casi no escribo y mucho menos hago visitas como esta pero prometo pasearme mas seguido por aqui, citla ya no cubre mis espectativas pero bueno espero preparar un blog propio aunque como sabes, tengo pocos contenidos pero bueno... ya me daré tiempo.
Espero te acuerdes de mi, soy Grecia Llanas, de citla, una fiel admiradora tuya.
Te mando un abrazo y felicidades por este bello trocito de tí.
:: Grecia ::
Ah que bella descripcion de el mar de pensamientos que corren dentro de nosotros¡
Besos¡
hola Jorge, primero que nada permíteme pronunciarme sobre este poema. no como una analista sino mas bien como una chica que escribe y se encanta con las letras, me parece que este tema es el que mas me gusta siento una especie de conexión con los latidos de tus versos y esa es la idea verdad, hacernos latir al compás de tu sentir compartiendo la infinita necesidad de siempre escribir leer y volver a escribir.
te aprecia
Alejandra
Saludos desde Ecuador
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